620 H001.- El origen de las Cortes.

El origen de las Cortes. Claves de una crisis (Cádiz)

Imagen del Cádiz de finales del siglo XVIII, según un grabado de Tomás López del año 1795

Autor: Juan Luis Candón

Introduccion

Uno de los episodios históricos más gloriosos de la ciudad de Cádiz fue el ocurrido con motivo de la invasión francesa de España y la posterior creación de la Constitución liberal de Cádiz, conocida popularmente como «la Pepa», por haber sido promulgada el 19 de Marzo de 1812, fecha de la onomástica de San José.

El Cádiz de la época vive una época de convulsiones sociales y políticas sin precedentes, pero también de esplendor. Pero ¿cuáles fueron las razones de la profunda crisis política española que derivó en la invasión francesa?

Podría decirse que las tropas de Napoleón Bonaparte no entraron en España por la fuerza, sino por la ineptitud de un rey. Carlos IV fue un monarca ambicioso pero poco inteligente, y su actuación ha quedado para la Historia como muestra de la decadencia de una dinastía.

Puede que Napoleón, que no conocía España ni a los españoles, dedujera erróneamente que si sus reyes eran tan ineptos, el pueblo también debía serlo.

La familia de Carlos IV, de Goya. El rey aparece a la derecha y su hijo Fernando VII, de azul, a la izquierda

La debilidad de un Rey

Napoleón, emperador desde 1804, soñaba con poner la economía europea al servicio de la francesa. Estuvo a punto de conseguirlo, pero Inglaterra tenía más y mejores barcos, y diezmaba la flota francesa. A esto, Napoleón respondió con un intento de excluir a Europa en su totalidad del comercio con Inglaterra para estrangular su economía.

Esto sólo se podía conseguir si se cortaban las comunicaciones marítimas con España y Portugal. Desde España, Inglaterra recibía la lana de las ovejas merinas y el algodón de Motril, materias primas imprescindibles para su industria textil.

Carlos IV buscaba la alianza de la todopoderosa Francia, ante la inestabilidad de su gobierno. En octubre de 1807, firmó con el emperador francés el Tratado de Fontainebleau, por el cual permitía el paso de tropas francesas por España para la conquista de Portugal. Esta fue una razón más para que se produjera en marzo del año siguiente el motín de Aranjuez, que provocó la abdicación de Carlos IV en su hijo Fernando VII. Napoleón, bajo el pretexto de «ayudar» a la familia real a aclarar sus diferencias, consigue que todos sus miembros salgan de España, cuando ya sus tropas han penetrado en la península.

Constitución de 1812

La Constitución de Cádiz es uno de los textos de mayor importancia en la historia moderna de España, no sólo por los hechos históricos acaecidos durante su promulgación, sino por su contenido liberal, inspirado en códigos anteriores de otros países, aunque con indudables referencias a la realidad política y social de la España de la época.

La historia de la España de los años 1808-1813 no es una guerra de buenos y malos. Numerosos historiadores señalan que, aunque para España resultó inadmisible reconocer a José Bonaparte como su rey, el francés procuró siempre ganarse la amistad de los españoles. Prueba de ello es que nombró un gabinete constituído en su mayoría por los mismos ministros que había designado Fernando VII al asumir la corona tras el motín de Aranjuez, y emprendió un programa de modernización del país que pretendía entroncar con las reformas de Carlos III, interrumpidas durante la gestión de Carlos IV.

En la España de 1808 pueden diferenciarse tres posturas ideológicas:

Los absolutistas, partidarios del Antiguo Régimen, es decir, la división de la sociedad en estamentos (nobleza, clero, pueblo) y poder sin límites del rey.
Los reformistas, que defienden la necesidad de cambios en la política española, pero sin detrimento del poder del Rey.
Los liberales, inspirados en los aires revolucionarios de la época, que desean una transformación de la sociedad política, defienden el dogma de la soberanía nacional, la sociedad de clases y la promulgación de una Constitución.

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